jueves, 14 de febrero de 2008

Especial San Valentín

Ya está aquí este Jueves del Amor! Que sepan que pertenezco al bando escéptico de los que creen que San Valentín es más comercio que sentimiento, eh? Pero como el tema está por todas partes (la gente compraba esta mañana rosas y claveles en los kioscos de la Plaza de Manuel Becerra, los periódicos vienen repletos de corazones, la oficina está animada con mensajes entrando a los móviles y el hilo musical de KissFM también), donde quiera que miro, leo o escucho, no queda más remedio que hacer una entradita…

El enamoramiento, ese delicioso estado de “imbecilidad transitoria” como lo definiera Ortega y Gasset, absorbe la atención, estimula los sentidos y se basa de alguna manera en la admiración. Es un revoloteo de hormonas, endorfinas y emociones. Es un coctel momentáneo y con fecha de vencimiento, como dice Chapi Escarlata muchas veces en su blog, pero hace vivir sensaciones tan sublimes que lo vuelven adictivo y al desaparecer, como en cualquier adicción, el vacío que deja causa pena y es motivo de angustia, quizás se manifieste así el equilibrio que reina en otras cosas de este mundo.

Por ahí he recopilado en la red una divertida lista de síntomas de enamoramiento. Es tan larga y diversa que no son muy coherentes, a veces repetitivos, y he tenido que corregir modismos argentinos, españoles, algo locales, pero aquí les va el resultado:

- Si todo era orden en tu vida hasta que llegó esa persona, capaz de desbaratar en un segundo lo que te llevó años construir.
- Cuando l@ extrañ@s a todas horas.
- Cuando no puedes sacarl@ de tu mente en ningún momento. Piensas en ella/él cuando te despiertas y también antes de quedarte dormid@. La echas de menos siempre
- Cuando una mirada, una caricia, un abrazo, un beso, etc., te hacen bailar mariposas en el estómago.
- Cuando te late el corazón a mil por hora cada vez que le ves o estás cerca de él/ella.
- Cuando recuerdas cada momento como si fuera el último.
- Cuando su felicidad es la tuya.
- Cuando aunque quieras odiarl@ se te hace imposible.
- Cuando no existe nadie más por la calle.
- Cuando cada cosa que ves, escuchas o hueles, te recuerda a él/ella.
- Cuando cualquier excusa es buena para comprarle lo que le gusta.
- Cuando te sientes la persona más feliz de la tierra y sonríes y lloras sin ninguna razón aparente.
- Cuando el tiempo a su lado pasa volando y siempre quieres más, volviéndote adict@ a su contacto.
- Te has convertido en un ‘happy’. "No pasa nada" es la muletilla preferida y estás “de un generoso”…
- Buscas cualquier excusa para estar con ella. Un "me he dejado algo en tu coche" o "pasaba por aquí" son frases de lo más recurrentes.
- La palabra "suficiente" no existe. Puedes conversar durante horas, pasar días enteros junt@s, llamarse por teléfono y mandarse mensajitos todo el día... ¡y siempre quieres más y más!
- Estás con gente y de repente te acuerdas de algo que dijo o hizo y te sonríes sol@.
- Tus hormonas están extrañamente fieles.
- Te dan ganas de llamarl@ porque están dando en la tele una de sus películas favoritas, o porque estás en el Homecenter y a é/ella le encanta el Homecenter.
- "Los defectos se transforman en efectos". Sus espinillas te parecen tiernas. Su tartamudeo cuando está nervios@ te derrite.
- L@ miras y le encuentras hermos@ e irresistible.
- También es interesante, súper inteligente, tiern@, considerad@, dulce, gracios@, original, maravillos@. Nadie se le compara.
- Cantas o tatareas alegremente. Los oídos de gente inocente sufren las consecuencias de tu enamoramiento.
- Te gustaría hacer mil cosas con él/ella: ir a la playa, de camping, de vacaciones, llevarl@ a tu sitio favorito, a tu lugar de veraneo cuando niñ@, a un café bonito que descubriste hace poco.
- Cuando lo estás pasando bien en algún lugar, te dan ganas de tele-transportarl@, para que estuviera disfrutándolo también contigo.
- Te interesa genuinamente todo lo que te dice y te cuenta. Hablan mucho y sobre los temas más diversos. Nunca te aburre.
- Tienes una memoria prodigiosa en todo lo relacionado con él/ella. Te acuerdas de todo. Fechas, lugares, anécdotas, frases y conversaciones.
- Te sientes feliz. Sientes que tienes suerte de haberle encontrado.
- Lo pasas bien con él/ella siempre. No importa lo que hagan, o donde estén. Hay una extra intensidad en todos los momentos. Si llueve, es romántico. Si hay sol, es un día precioso. Si entran en un antro con música y ambientación horrible, se ríen juntos.
- Le llamas o le mandas mensajitos después de que se vieron, diciéndole que te encantó estar con ella, que fue muy lindo todo.
- No puedes evitarlo. Te acuerdas de él/ella con algunas de tus canciones favoritas. Incluso le dedicas algunas. Podrías compilar una banda sonora con las canciones que relacionas con él/ella.
- Si un día está neurótic@, o triste, o ansios@, o con miedo, o con angustia, o llanto, o cualquier tipo de ataquito o problema, te enternece completamente. Te dan ganas de abrazarl@ y hacerl@ sentir mejor.
- No te importa dormir menos, levantarte temprano, viajar, o trabajar como un loc@ un día, para verl@.
- Te dan ganas de mostrarle tu pieza, tus cosas, tus perros, las fotos de tu infancia, el lugar donde jugabas cuando chic@, tus recuerdos, lugares y escondites favoritos.
- Piensas en él/ella y hablas de él/ella constantemente. Te esfuerzas por no volverte tan monotemátic@ ante tus amigos, pero a veces no puedes evitarlo.
- La gente dice que se te nota. Tú no sabes porqué.

Un poco largo este test…y sin puntuación¡! Pero ahí verán reflejados algunos excesos amorosos por los que hemos pasado todos…depende de cuanto más o menos "cardíacos".

Del sarcasmo realista de Ortega y Gasset (o de Napoleón “El amor es una tontería hecha por dos”…) paso a la dulzura del gran escritor Lope de Vega, que lo describe así en estos versos magníficos:
Mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,
Enojado, valiente, fugitivo,
Satisfecho, ofendido, receloso.
creer que un cielo en un infierno cabe,
dar la vida y el alma a un desengaño:
esto es amor.
Quien lo probó lo sabe.
Y Pablo de Tarso, hace dos mil años, dejaba esta otra descripción:

El amor es comprensivo y servicial:
El amor nada sabe de envidias,
De jactancias, ni de orgullos.
No es grosero, no es egoísta,
No pierde los estribos, no es rencoroso.
disculpa sin límites, confía sin límites,
espera sin límites, soporta sin límites.
El amor nunca muere.

La simple atracción es un evento más leve, pero no es tan sencillo llegar a un sentimiento así de intenso o encontrar a alguien que lo haga crecer, este amor de los poetas. Es un privilegio infrecuente realmente, mucha gente no lo conoce jamás. Probablemente la edad y la madurez de las personas influyan aquí para bien, a la hora de tropezarse con estas formas poéticas e intensas de enamoramiento.

Y como “serratiana” convencida, me despido con la definición de Joan Manuel para “Eso que llaman estar enamorado”…

Eso que llaman estar enamorado
le toca al que le toca.
El más prudente puede quedar atrapado
de cuatro patas.
Más de un científico lo ha catalogado
como una enfermedad
que se cura en contacto con la realidad
de cada día.
Los árboles tapan el bosque,
pero es tan bonito que parece mentira.
Siempre es la primera vez
y siempre deja herida.
Quien lo sufre da por sentado
que como aquella morena
no hay otra igual, sin haberlas probado
una por una.
Afirmarán, con ojos de cordero,
que como aquella rubia
no hay otra igual, sin haber salido
de Zaragoza.
Se van perdiendo las proporciones.
Sólo hay un tema de conversación.
Se confunden las ilusiones
con el culo. Y viceversa.
Eso que convierte al feroz en calzonazos
y al viejo en criatura
tiene síntomas muy parecidos al ataque
de locura.
Se atiborra la cabeza. Se reblandece el corazón.
Del infierno al nirvana.
Pero tiene una cosa, quizá, a su favor:
no se contagia.
Para que pueda prosperar
no es suficiente con una pareja.
Enamorados tienen que estarlo
ella de él y él de ella.
Lo perseguimos y nos persigue, porque
de vez en cuando funciona.
Es un instante, pero este instante,
sólo este rato,
es una traca que revienta en el pecho.
Es llenar la eternidad.
Es hablar con Dios.
Atrapar el infinito.
Eso que llaman estar enamorado.

Nada muchachos, si están pasando a estas alturas por un ciclo alto de serotoninas, endorfinas y otras químicas amorosas, aprovechen y disfruten de los corazones rojos de este día de San Valentín. Y si no, si es época de bajón sentimental, pues no desistan de entrar a él, que al menos en ésto la edad parece que no importa, mejor aún, dicen que el que lo ha padecido alguna vez queda predispuesto! Pues a reincidir…

6 comentarios:

El isleño dijo...

cierto que hoy es un día especial para todos lo que estamos o hemos estado enamorados algún día. Como bien dice Betty, crea adicción. Incluso quienes lo disminuyen y/o ponen en duda (el sentimiento y el raro placer de sentirse vivo, no la adicción a las compras y a quedarse sin un kilo por todas las fechas que te impulsan a ello) reconocen que es propenso a las "recaidas" quien ya una vez lo "sufrió".

Yo amo mucho, por ejemplo, y a personas especiales porque cada cual llegó para hacer mejor, más rica y plena mi vida. Por eso me refugiaré en Benedetti para que diga en mi nombre:

"Corazón coraza.

Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza

porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro

porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no."

Aguaya dijo...

Qué gusto leer el post de Betty y luego el comentario de el Isleño, Benedetti incluido...

Yo estoy enamorada, en primer lugar, de mis dos niños, y después, de mi esposo ;) (si me oye, me mata, jajajaja)

Felicidades desde Berlín!!!!

Betty dijo...

Hola Aguaya! gracias por venir amiga, sí el amor y el querer son inconmensurables, hay sitio para todo el mundo y esos peques tiranuelos son arrasadores;-)...
Sí isleño, una idea que me quedé pensando que faltaba en el post: el amor enriquece, debía decirse, y ya la traes aquí, justo...Este isleño cuando viene con el AKM de Benedetti bajo el brazo es un peligro eh? ;-))) Me ha dejado conmocionada. Oye Ivan di algo mi´jo...dónde andas sweet-heart???

El isleño dijo...

Bueno, Betiña, te adelantoq ue el Ivanoski ayer al parecer estaba "reunido" con Agrelo y Oscarito en el 1830, coordinando donde hacer la fiestecita de la Caulineau... creo que al final no llegaron al concenso del lugar, pero si cogtieron una buena "nota" al menos los dos socios que te mencioné antes porque me llamaron a las 11 pm, haciéndose pasar por "e'tranjeros" y tratando de correrme una máquina... :-)))

Por cierto, Aguaya y Betty (en orden ortográfico), ayer estuvimos casi toda la tarde con Ivis en la Feria del Libro y fue bonito cruzar la frontera de lo virtual a lo personal... Y, para que queden con algo de esas envidias que quiero intercambiar con Aguaya, terminamos con la presentación de un libro de toda la poesía de neruda y una selección de la mejor poesía latinoamericana, escogida por Benedetti... Qué regalo de día de San Valentín!!!!... lo que se perdieron!!!!... Ya Ivis les contará a través del blog.

un beso a esas dos enamoradas.

Aguaya dijo...

Oye, sí, qué envidias!! porque no sólo la feria o los libros, sino hasta la misma Ivis: yo no la conozco personalmente!!!!
Me alegra que hayan pasado un gran día. Que se sucedan muchos otros así o mejor!
Saluditos desde Berlín, sin Feria pero con Berlinale :-P

El isleño dijo...

solo decirte, Aguaya, que de cierta forma Uds. estaban ahi. Estábamos Ivis y yo, cierto, pero también Uds... ¿o no son parte Uds. dos de esa muchedumbre de jóvenes cubanos sensibles, inteligentes, audaces...

¿tu ves?, así si diste en un buen clavo: tu tienes ahora la Berlinale, que imagino sea una especie de Festival de Cine Latinomaericano de La Habana en cuanto a convocatoria y, sobre todo, con una espectro muchísimo mayor de participación y faranduleo... esto último es inevitable, y hasta aquí brincan anunciando la particípación de Bardem en el último Festival de La Habana. Good for you!!!!...

Bueno, Ivis es super chévere y me dijo que estará aquí aún por un par de semanas más, así que espero verla de nuevo y trasladarle vuestros saludos... ya les comentaré cuando nos volvamos a ver.